lunes, 29 de octubre de 2007

Cientos de fans protestan por quedarse sin ver a Héroes a causa del gran atasco

Noticia publicada el día 29/10/2007 en Las Provincias


El Circuit recobra su imagen habitual con el desmontaje del escenario y gradas

La espina que dejó Héroes del Silencio hace once años a sus fans cuando se separó fue muy profunda. Pero en la noche del sábado, ésta se clavó un poco más en el corazón de muchos de ellos. Fue a causa de un monumental atasco en la A-3 y A-7 en dirección al Circuit lo que lo provocó la desesperación de miles de seguidores de Héroes del Silencio, que veían truncadas todas las ilusiones depositadas en la cita musical. Muchos de ellos lanzaban ayer el grito al cielo en internet, a través de mails a los periódicos y mediante llamadas telefónicas expresando su indignación.

"Salimos de casa a las cinco de la tarde al terminar el trabajo. Cogimos la autopista para llegar cuanto antes a Cheste, pero a la altura del aeropuerto vimos que iba a ser misión imposible llegar a tiempo", explicaba ayer el vecino de Gandia Juan Martínez, que llegó hora y media después del inicio del concierto. "Al menos pudimos ver algo. Otros sin embargo ni eso", añadió,

Y es que los 17 kilómetros de cola que se formaron en los accesos de la A-3 y los 15 kilómetros en la A-7, como informaba ayer LAS PROVINCIAS, fueron la peor pesadilla de numerosos fans de la banda maña. La imagen que se podía ver ayer desde la misma zona del concierto es digna de mención. Una larga fila de coches parados esperando poder entrar al parking en un monumental atasco que pasará a la historia, como el concierto que dio la banda. Eso sí por motivos distintos, claro está.

Las puertas del recinto se abrieron a las 13 horas. Los primeros en entrar fueron los cientos de fans que pasaron la noche del viernes allí. Los siguientes en acceder fueron los que llegaron la misma mañana del sábado. Ninguno de estos seguidores tuvo problema de atasco para acceder al trazado valenciano. "Los que somos grandes seguidores sabíamos que esto podía pasar y por eso decidimos llegar con muchas horas de antelación. Eso sí, hasta el momento del concierto fueron muchas horas con frío y lluvia", señalaba ayer la valenciana Paula Navío.

Indignación

Sin embargo, a pesar de que se habían habilitado 35.000 plazas de parking y un servicio de autobuses a la ida y a la vuelta del concierto -trenes no habían a la vuelta- estos no pudieron resistir la avalancha, como reza un tema de Héroes, de gente que acudía al Cheste a partir de las 18.30 horas.

"El concierto de la despedida se convirtió en el atasco de la despedida. Miles de personas nos encontramos en la carretera con unas entradas que a la hora que conseguimos pasar Torrent ya estaban caducadas. Tardamos más de tres horas para poder pasar desde el kilómetro 514 al 509, para llegar a un nido de coches mal aparcados y escuchar a Bunbury despedirse de la gente", señalaba Curecrow en la página web de LAS PROVINCIAS. Mientras, Jesús Poveda se preguntaba. ¿Cómo es posible que saliendo con cinco horas de antelación desde Alicante llegáramos a las 12 de la noche al circuito?

Pero la cosa no acaba ahí. Otros seguidores llegaron caminando al trazado valenciano. Numerosos fans se bajaban de los vehículos para ir a pie hasta el Circuit y al menos poder ver algo del concierto de Bunbury y los suyos. Peor suerte tuvo Cari, como se puede leer en su comentario de la web: "Si yo deposito mi ilusión en verlos y cuando llego a la puerta, después de 10 horas de viaje (venía desde Murcia y se suelen tardar entre dos horas y media), me dicen que no puedo pasar... porque está lleno... ¡Qué me devuelvan el dinero!

LAS PROVINCIAS se puso ayer en contacto con la productora del concierto, la empresa Rock and Chicken, aunque estos prefirieron no hacer declaraciones al respecto de lo ocurrido antes, durante y después del concierto. Y es que no sólo hubo un caos momentos antes de la actuación de Héroes.

De buena mañana al abrirse las puertas los fans tuvieron que hacer un poco de ejercicio físico, ya que los accesos al recinto eran kilométricos. Una vez dentro varias puertas sin señalizar cerraban el paso a los fans que esperaban poder colocarse ya en el mejor lugar para ver a sus ídolos. Hasta las 16.30 no se abrieron estas segundas puertas.

Una vez abiertas, los primeros en llegar al escenario, como es lógico, cogieron las mejores ubicaciones, pero los que no fueron tan afortunados tuvieron que conformarse con un lugar menos privilegiado. Sin embargo, desde muchas posiciones se veía el escenario con dificultades y muchos de los asistentes tuvieron que conformarse viendo la actuación de la banda a través de las pantallas gigantes. "No vi nada prácticamente. Además de que llegué pasada una hora por el atasco me tocó ponerme en un lateral y no veía nada. Para qué tan grande el recinto, ¿para ganar más dinero? No hubiese sido mejor una mejor visibilidad que no vender tantas entradas", señalaba Flordeloto a este periódico.

A la vuelta, otro caos

Las retenciones de tráfico en las salidas de Cheste tras finalizar el concierto también fueron una odisea. Y es que no podía absorber a las más de 83.000 personas que habían acudido con sus vehículos, algunos en los autobuses fletados por la organización, a ver a los Héroes del Silencio. Algunos se lo tomaron con humor y durmieron en sus coches hasta pasadas las cuatro de la mañana, momento en el que desaparecieron las retenciones, según informaron ayer fuentes de Tráfico.

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